El agua de los miles de riachuelos suena alegre. Arrastra millones de murmullos saltarines mientras recorre el paisaje ruidoso de los Pirineos. Puede ser cualquier lugar, Aigüestortes, Irati, Ordesa, Alt Pirineu, Guara, Baztan… Las libélulas revolotean con rapidez esquivando la vegetación, levantando ínfimas gotas de agua. Las flores se desperezan en los inmensos prados de alta montaña, bostezan de puro gusto cuando el sol entra en los espesos bosques y las acaricia. El quebrantahuesos rompe la resistencia del aire y el gran ciervo rasca la corteza de un pino con sus poderosos cuernos. El sol se aúpa raudo o se estrella en el horizonte esparciendo colores brillantes por doquier. Las estrellas titilan y castañetean sus dientes, heladas de frío, colgadas del cielo oscuro de la noche… Y aunque no lo parezca, en medio de este barullo, todas las cumbres aguardan silenciosas el eco de nuestros pasos. Día a día, mes a mes. Disfruta y hojea nuestro calendario 2015.