Cádiz se asoma mimosa al mar, agitado y mezclado, las aguas del Mediterráneo y del Atlantico chocan y dan forma a olas rizadas que el viento aviva más aún. Hablar de Cádiz es imaginar ese mar tremendo y rotundo. Su alma es marinera, no hay duda, pero existe otro mundo tierra adentro, allí donde las sierras montañosas se ponen de puntillas para no perder el detalle y otear el horizonte. Entre calizas y areniscas se alzan picos como El Torreón, el más alto, San Cristóbal, el Cerezo, el Reloj, Albarracín…
Entre ambos, mar y montaña, se extiende la campiña, suave y tranquila, por donde discurre el río Guadalete y se aposentan los humedales y lagunas.

En este escenario natural agreste y hermoso se encuadran sus pueblos, de un banco inmaculado, dispuestos a plantar cara al inmisericorde sol, preparados para acoger al visitante y contarle historias de conquistas, del paso de antiguas civilizaciones como fenicios, romanos y musulmanes.
Hay núcleos que aspiran esos aires marinos; otros, en el interior, se dejan querer por las rocas y los bosques. Todos destilan encanto con fuertes sellos de identidad histórica y extraordinaria belleza.
En este libro escrito por un gran conocedor del territorio, David Muñilla, Pueblos con encanto de Cádiz y las mejores rutas de senderismo, nos paseamos por una larga lista de poblaciones que nos enamorarán desde el primer momento. Disfrutaremos con sus rincones, con su gastronomía y sus gentes. Y, además, podremos asomarnos a sus entornos naturales gracias a las propuestas montañeras que transitan alrededor de estos pueblos con encanto.